Radiografía de la riqueza en España: de los 687.000 euros de media por madrileño a los 229.000 de un extremeño

En España, como ocurre en el resto del mundo, una pequeña parte de los ciudadanos posee la mayor parte de la riqueza del país. Hasta ahora se sabía a grandes rasgos cómo se distribuye ese patrimonio a nivel nacional, pero nunca se había indagado en cómo se reparte en cada comunidad autónoma. Un estudio recién publicado por EsadeEcPol arroja luz sobre esta cuestión y realiza la primera radiografía sobre la riqueza a nivel regional. Los resultados apuntan a que los madrileños son los ciudadanos más ricos con un patrimonio neto (descontando deudas) de 686.988 euros de media. El triple que los extremeños, que atesoran una riqueza de 228.869 euros.

La desigualdad entre el norte y el sur del país es muy llamativa. Todas las comunidades autónomas donde la riqueza supera la media nacional (382.828 euros) están en la mitad norte de España. El segundo territorio donde mayor es la riqueza media por habitante es Baleares (477.048 euros), seguida de Cataluña (433.628 euros), Cantabria (404.045 euros), Aragón (401.409 euros) y La Rioja (399.723 euros).

Ya por debajo de la media de España, se encuentran comunidades como Castilla y León (344.636 euros); Galicia (325.063 euros), Comunidad Valenciana (314.461 euros); Asturias (306.818); Murcia (297.198 euros), Castilla-La Mancha (285.259); Canarias (261.370); Andalucía (258.378) y Extremadura (228.869).

Las cifras pueden parecer abultadas (lo son) y dar la sensación de que realmente los ciudadanos son más ricos de lo que son. La razón por la que las medias son tan elevadas son las enormes desigualdades que existen en el reparto de la riqueza. Una pequeña élite posee la mayoría de los activos. Por ejemplo, a nivel nacional el 10% de los ciudadanos del país tiene en su poder un 60% de toda la riqueza que se contabiliza en el país. Si dividiéramos a la población en dos mitades exactas veríamos cómo la mitad más rica del país acumula el 93% de toda la riqueza, mientras que la mitad más pobre apenas posee el 7%.

Estas desigualdades se repiten en todas las comunidades autónomas, aunque en algunas con más intensidad que en otras. En general, hay una tendencia a que, cuanto más riqueza acumula un territorio, más desigual es su reparto. El caso de Madrid es palmario. Es la comunidad con mayor riqueza media por habitante y también la región donde más patrimonio acumula el 1% más rico: uno de cada tres euros de riqueza acumulada en la capital pertenece a esa superélite.

Los territorios donde los más ricos controlan más porcentaje del patrimonio de la comunidad son Madrid (donde el top 10% posee el 63% de la riqueza), seguida por Baleares y Canarias (62%) y Cataluña (60%). Por debajo aparecen Galicia (57%), Comunidad Valenciana (57%); La Rioja (55%); Murcia (54%), Andalucía, Cantabria y Aragón (52%); Asturias (50%), Extremadura (49%); Castilla y León (48%) y Castilla-La Mancha (47%).

La cuestión de la riqueza y su desigual reparto es uno de los grandes temas económicos de los tiempos modernos. Estas fortísimas desigualdades, mayores incluso que las que existen en el reparto de la renta, tienen efectos muy importantes para la sociedad y la economía, como señalan los autores del informe. "La riqueza marca las capacidades de gasto e inversión a largo plazo e influye también junto a la renta en las oportunidades económicas", sostienen. El estudio se ha elaborado a partir de datos fiscales de un millón de hogares entre 2016 y 2022 en los que residen 2,9 millones de personas y es pionero en el análisis regional de la riqueza. No se incluye información de País Vasco ni de Navarra porque tienen regímenes fiscales propios.

La mitad del patrimonio es inmobiliario

Hablar de riqueza o de patrimonio en España sigue siendo sinónimo, fundamentalmente, de ladrillo. Un 52% de toda la riqueza privada del país es en bienes inmobiliarios, sobre todo primera vivienda (un 30% de todo el patrimonio). Después, el vehículo más común son las cuentas corrientes (16%), los activos empresariales (11%), las acciones (11%), planes de pensiones y seguros de vida (5%) y fondos de inversión (5%).

El tipo de patrimonio que atesoran los españoles también cambia en función a medida que se va avanzando en la pirámide de la riqueza. Dentro del 20% que menos riqueza tiene el activo más frecuente son las cuentas corrientes, que representan en torno a un 63% de toda la riqueza que conserva este grupo de población. Si se avanza a rangos de riqueza intermedios, el inmobiliario aparece como la principal fuente de patrimonio, llega a suponer el 70% de la riqueza en este tramo.

Si se pone el foco en las élites que acumulan la mayoría del patrimonio del país, se observa que los productos de inversión (vivienda para no residir, fondos, acciones...) ganan peso. Hasta el punto de que para el 1% más rico del país, la mayoría de su riqueza se reparte en activos empresariales, acciones y fondos de inversión.